Las rutinas, los hábitos y los rituales son súmamente beneficiosos para el bienestar psicológico y emocional de cualquier persona, ahora bien, en el caso de niños y niñas, son imprescindibles para su crecimiento sano y equilibrado.
🤔 Empecemos por el principio: ¿Qué es cada cosa?
1️⃣ Rutina: Es un conjunto de actividades que se realizan regularmente en un orden fijo, generalmente sin pensar mucho en ellas.
➡️Te invito a reflexionar sobre tus rutinas diarias y tomar consciencia de cuáles te aportan tranquilidad, seguridad y estabilidad y cuáles te generan aburrimiento y estancamiento.
2️⃣ Hábito: Es un comportamiento que se repite de manera automática y que se ha adquirido con el tiempo mediante la repetición constante.
➡️Te invito a reflexionar sobre tus hábitos y hacer una lista de cuáles son saludables y cuáles no.
3️⃣ Ritual: Es una serie de acciones con un significado simbólico o emocional que se realizan de manera deliberada, a menudo con fines personales, espirituales o culturales.
➡️Te invito a que tomes consciencia de los rituales que realizas y te aportan significado, propósito y te ayudan a crear un sentido de conexión y bienestar emocional con tus seres queridos 😉.
Ahora vamos a hacer zoom y centrarnos en niños y niñas:
¿Qué aportan a niños y niñas las rutinas, los hábitos y los rituales y cómo podemos generarlos padres y madres?
Son esenciales para el desarrollo de niños y niñas y aportan numerosos beneficios. Te lo explico a continuación:
1️⃣ Rutinas:
¿Qué aportan?
✔️ Las rutinas brindan seguridad y previsibilidad a los niños, ayudándoles a saber qué esperar en cada momento del día. Esto reduce la ansiedad, fomenta la independencia y facilita la adaptación a las normas y expectativas familiares.
✔️ También ayudan a mejorar la gestión del tiempo y favorecen el desarrollo de habilidades básicas como la higiene, alimentación y sueño.
¿Cómo generarlas?
✳️ Establecer horarios regulares para actividades diarias (comer, dormir, bañarse).
✳️ Ser consistente con los tiempos, pero permitiendo cierta flexibilidad según sea necesario.
✳️ Involucrar al niño/a en la creación de su rutina de manera divertida, utilizando canciones o juegos para cada actividad y realizando juntos una tabla de rutinas visual.
2️⃣ Hábitos:
¿Qué aportan?
✔️ Los hábitos desarrollan la autodisciplina y ayudan a los niños a realizar actividades básicas de manera automática, como lavarse los dientes o recoger sus juguetes. Esto les otorga una mayor independencia a medida que crecen.
✔️ También fomentan el sentido de responsabilidad y contribuyen a crear una base sólida para conductas saludables en el futuro.
¿Cómo generarlos?
✳️ Repetir actividades específicas diariamente hasta que el niño las asimile como parte de su rutina.
✳️ Dar reconocimiento al niño cuando realice la tarea indicada, como lavarse las manos antes de comer.
✳️ Predicar con el ejemplo, ya que los niños imitan los hábitos que ven en sus padres.
3️⃣ Rituales:
¿Qué aportan?
✔️ Los rituales ofrecen un significado emocional o simbólico a ciertos momentos del día, como la hora de dormir o las celebraciones familiares. Crean momentos especiales que fomentan el vínculo emocional entre los niños y sus padres.
✔️ Los rituales también fortalecen la sensación de pertenencia y contribuyen al desarrollo de valores y tradiciones familiares.
¿Cómo generarlos?
✳️ Crear pequeños rituales como leer un cuento antes de dormir o cantar una canción al despertar.
✳️ Realizar actividades familiares con significado, como tener una cena especial los fines de semana o festejar cumpleaños y otras celebraciones de manera consistente.
✳️ Involucrar a los niños en tradiciones culturales o espirituales para que se sientan parte de algo más grande.
En resumen:
✅ Las rutinas proporcionan estructura y seguridad.
✅ Los hábitos fomentan la autodisciplina y la independencia.
✅ Los rituales aportan significado y fortalecen los lazos emocionales.
Padres y madres pueden fomentar estos elementos a través de la consistencia, la repetición y el ejemplo, creando un entorno estable y enriquecedor para sus hijos/as.
Otro día hablaremos de cómo ayudar a los hijos a generar flexibilidad, adaptabilidad y resiliencia. Pero eso será otro día 😉